El viernes era mi último día de trabajo en mi ya ex-empresa. Pensaba que me daría más pena, pero estuve tan liado mandando emails de despedida formales, personales y cerrando cosas, que me dio la una de la tarde y ya me tenía que ir a recoger las tortillas y el picoteo (rico y bueno) que había encargado para invitar a los compañeros. Las despedidas fueron emocionantes, pero como éramos ciento y la madre, en cuando empezaba a tragar saliva con alguna, alguien interrumpía para despedirse también, así que me fui insensibilizando hasta acabar por no sentir nada especial, aparte de buen rollo, para ser un momento tan de lagrimilla. Me quedo con el abrazo con dos bofetones paternales que me dio por todo el morro un señor que, en cinco años, me había saludado tres veces por los pasillos. No entendí nada, pero como no quería hacer feos ese día, me quedé sonriendo y dando las gracias, y oliendo a su loción de droguería. En cambio, con mis mejores amigos del trabajo tuve que tirar de los mejores hachazos de mi colección para controlar las emociones, que de ellos sí que me daba pena despedirme, y claro que me importas y por eso no me importas.
El domingo con la cosa del viaje, y tras un fin de semana bastante movido en el que hubo eventos (Astrud en El Sol y Los Novios Instantáneos en el Elástico), reencuentros, presentaciones y alguna que otra conversación de éstas que te dejan un punto agridulce, me levanté hecho un manojo de puerros y no tuve ni ganas de desayunar. Comprobé quince veces la maleta y los papeles, me recorrí la casa otras doce sin ir a ningún sitio, hice pis como otras cuatro veces, y ya me fui al aeropuerto, perfectamente atendido y cuidado, luego me quejo.
En el avión todo bien, salvo por un equipo alemán de hockey femenino campeón de algo que se pasó todo el viaje cantando y haciendo coreografías con los brazos. Luego dicen que a los españoles no se nos puede llevar a ningún sitio. Me hubiera enfadado más si no fuera porque me daba bastante morbo la mitad (aproximadamente, puede que tres cuartos) del equipo de hockey, y claro, uno se ablanda, en el sentido figurado.
Llegamos a Colonia, cogí mi maleta bastante rápido, y me marché pasando entre una coreografía que estaban haciendo en ese momento, de estas que se hacen letras con el cuerpo a la vez que deletrean un nombre, concretamente entre la “C” y una especie de “O”. Todo el mundo sabe que la “O” es superdifícil de hacer con el cuerpo y bastante tenia la chica con intentar no enseñar el tanga, que a la pobre se lo vio hasta el que organizaba la cola de lo taxis, pese a sus esfuerzos. Una “O” con mucho mérito.
Cogí un taxi y le enseñé el papelito con la dirección del hotel al taxista, que le faltaba el pulgar y tuvo que coger el papel con el muñón y la punta del dedo índice, con mucha maestría. Yo pensaba que iba a Colonia, pero no, nos empezamos a meter por carreteras secundarias totalmente oscuras y aparecimos en un pueblo a 20 quilómetros de Colonia, concretamente en medio de un bosque. En fin, mis planes turísticos para la semana al cuerno. Pedí un sándwich en la recepción para subírmelo a la habitación, me deshice la maleta, me comí el sándwich a tres centímetros de la tele (la única mesa de la habitación tiene encima la tele) y me partí el cuello en la cama, que al final el sábado me lié más de lo que tenía planeado y estaba bastante roto.
Estos días he estado de formación, con otras cuarenta personas. No tienen nada que ver conmigo en lo que voy a hacer, pero necesito la calificación que se da al final de la misma para poder hacer una parte de mi trabajo. A partir de ahora, voy a trabajar yo solo en España para una compañía alemana bastante fuerte que quiere expandirse, así que me tocará hacer formaciones de éstas de vez en cuando, porque lo voy a tener que hacer yo todo, no hay más narices. Estoy bastante acojonado, nunca he empezado de cero profesionalmente nada en mi vida y no sé que tal se me dará, pero también muy ilusionado. Si me sale bien es la bomba, que ya lo es, y si no, pues a otra cosa, que ahora es cuando me puedo pegar hostias sin arrastrar a nadie. Además, tengo experiencia en lo que voy a hacer, así que a ver si todo el tiempo que estoy perdiendo en darle vueltas a todo el rato lo empleo en confiar un poco más en mi. Tengo bastante ansiedad últimamente por esto, la verdad, me lo noto en el carácter, en las horas de sueño y en la cara.
El caso es que de las cuarenta personas, seis son “compañeros” míos de los que trabajan en Alemania, es decir, puede que no les vuelva a ver, salvo a un polaco que hace lo mismo que yo pero en Polonia y nos reuniremos con otros de otros países de vez en cuando. Muy majo el polaco, ya me ha dicho que tengo que ir allí de turismo, que él me monta un planazo barato y chulo, que la gente no tiene ni puta idea. La semana que viene no, la otra, conoceré a un marroquí que hará lo mismo que yo en Marruecos, a ver si es tan el plan como el polaco y empiezo a tener contactos buenos internacionales, que luego vienen fenomenal para las recomendaciones cuando quieres irte de viaje. Por lo demás, nada, que cuando vi el hotel ya de día me di cuenta de que era precioso, es un molino con un río y un lago en medio del bosque, un poco rollo “Funny Games” el entorno, pero muy chulo. Alemania mola, no sé quién me lo dijo este fin de semana cuando le contaba esto y es verdad, Alemania mola y mucho. Yo diría que, aparte de bonito, es un país muy confortable en general, y eso, cuando estás fuera de casa, no tiene precio.
Poca cosa más, la formación es muy útil pero muy rollo ni no te interesa el mundillo éste. Me acoplo a mi grupo corporativo para las comidas, el paseo y la cena (estoy hablando de gente de cuarenta años mínimo que entiende por diversión beberse siete cervezas cada noche en una mesa, yo me quedo en la tercera pinta) Ah, y he currado dos veces en grupo con ellos para ejercicios prácticos y qué bien trabajan los putos alemanes, qué serios son. Buenísimos, la verdad es que saben un montón y me viene fenomenal. A ver qué tal el examen del jueves, que creo que es durillo. Por cierto, si me saco el examen, me ha dicho el tipo que nos está impartiendo la formación, que seré el europeo más joven que se la ha sacado hasta ahora, qué presión, aunque en el fondo me mola ser el más joven de algo a mi edad, ya me quedan pocas de éstas, me temo. Creo que me han cogido un poco de manía en la formación, no por esto, sino porque soy el único junto con un indio que no hablamos alemán y la tienen que dar en inglés por nuestra culpa. Me da igual y no, sí que da un poco de palo, pero joder, a mi me apuntaron sin que yo lo pidiera y me dijeron que era en inglés porque iba gente de todo el mundo, lo que pasa es que ha coincidido.
Ya os contaré el resto, que me lío, y ya me ha salido un chorongo de post, que encima, con esto de estar sólo y en medio de un bosque todo bucólico, me ha quedado como un poco sosillo, ahora que lo he releído. Es lo que hay, buenas noches.
PD: Pido disculpas a Los Novios Instantáneos, que aunque fui a su sesión del sábado, la verdad es que no bailé nada. Es que yo o tengo el día bailón o no muevo ni la puntera de la zapatilla, aunque la oreja la tuviera puesta todo el rato. Qué bien estuvo veros después de año y pico, allá por el Plasidepop del 2006.
martes, septiembre 25, 2007
It walks
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13 comentarios:
Ay, qué pereza. ¿Ahora es cuando te tengo que decir que seguro que todo te va a salir bien porque vales mucho? ¿Otra vez?
Pues No!!! te va a ir como el culo, seguramente. Y todo esto porque he tirado los huesos de pollo junto con una costilla de ternasco, que no se que hacía allí, y la visión ha sido clara. Bueno, no me hagas mucho caso porque lo cierto es que los tiré tan fuerte que dos huesecillos se fueron a tomar por culo y al mensaje le faltaban los tiempos verbales y algún artículo. Además yo no entiendo mucho de estas cosas, vamos que yo creo que te va a ir bien. Ala Suerte!!! Y que Se Jodan los Alemanes!!! o no, si te caen bien claro.
Je, je, con lo que les jode a los alemanes tener que hablar inglés en su país porque alguien OSE no hablar su maravillosa lengua, je, je. Suena todo muy bien, mucho ánimo!
Dwalks, conozco a gente que empezó el chiringo así, ahora curran poco y ganan una bestialidad. Y como bien dices es el momento justo de darse el (hipotético) hostión.
Si no cuesta nada animarte, hombrepordios.
Si te eligieron, por algo sería y, aunque no tengo ni pajolera idea de a qué te dedicas, se nota que le pones pasión a lo tuyo y eso ya es un buen comienzo.
¿Si te nombran el europeo más joven en eso tuyo, te invitas a algo?
Ahora que eres alguien respetable, me invitarás a comer como yo me merezco, limusina incluida? :P
Seguro que lo harás estupendamente. Estoy convencida de que en el fondo te encanta la idea de iniciar algo tú solo, por miedo que te dé de vez en cuando. Disfruta mucho de Alemania, aunque estés en un hotel en el quinto pino. A mí me encanta.
Un abrazo
Mucha suerte Dwalks en tu nueva vida labo laboral. Y suerte para el examen. De todas formas y además de suerte convendría que estudiases algo. Un saludo.
Ya verás como todo merece la pena... Si no, para eso te quedas en tu casa!! Hohohohohoho...
Un abrazo, cachulo.
ya nos irás contando qué tal te va todo en tu nueva ocupación laboral, que seguro que estupendamente... y a ver si nos vemos de nuevo pronto, que estuvo chachiquesi, como un campeón hasta el final.
siempre nos quedará bilbao
Como las suelta el Ivancico....
No salías ayer en Muchachada Nui (nuii), Ivancico? creí divisarte...
Pero bueno.... me reengancho de nuevo y veo que te me cambias de curro....!y sin avisar!!
Pues ya nos contarás qué tal el exámen de hoy y a ver si consigues el nº1 del ranking en cuanto a joven promesa...je,je...
por cierto, que me muero de curiosidad por saber a qué te dedicas, antes y por supuesto, AHORA ;)
que vas a hacer una gira por Soria que te vah a forrar!
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