jueves, enero 04, 2007

Reyestréss

Hoy me he despertado y me ha costado un mundo irme a por los regalos de reyes. La verdad es que este año me parecía superinjusto que yo tuviera que regalar en casa después del despanoje que me han supuesto los viajes de Estados Unidos y China, que he tratado a los miembros de mi familia como a prostitutas de lujo, colmándolos de presentes y detalles, pero al final anoche me entraron los remordimientos por el estómago y esta mañana he madrugado y me he ido para el centro. Lo que tenía muy claro es que tenía que ir hoy porque yo he solido ser muy de último día otros años y al final regalas sin ningún tipo de cariño ni emotividad, quitándote los regalos de en medio como pruebas de gymcana, con las consecuentes caras de pez de los que abren tus regalos, aunque debo reconocer que no soy malo regalando, incluso en circunstancias extremas. Así que he decidido tomármelo con calma, cariño, y sin me faltaba alguno al final del día, pues todavía tenía mañana para remediarlo con un mínimo de dignidad. Afortunadamente, no ha sido necesario, aunque he acabado hasta las pelotas.

Todo el mundo dice que comprar los reyes es un rollo, una pereza y que acabas de los nervios. Sí, todo el mundo lo comenta con amargura, pero he llegado a la conclusión de que la gente es muy vacía y no especifica nada aparte de decir cuánta gente había en las tiendas, que qué rollo todo y que qué pereza de ciudad. Yo he decidido hacer un estudio algo más profundo para identificar los factores que hacen que un día de comprar regalos de reyes in extremis en Madrid sea peor que echarte un aliño de ensalada en los ojos. Ahí va:

La gente. Vale, empezamos por el clásico más obvio y así nos lo quitamos de en medio. La cosa es que como tú no estás sólo en tu ciudad y te encanta tener las mismas fiestas que todo el mundo, resulta que cuando tú tienes tiempo libre, o compromisos tipo Reyes, pues el pato lo pago yo, porque cuando yo puedo ir a por mis regalos de Reyes, allí estáis todos vosotros llenando las tiendas, haciendo colas interminables en las cajas, llenando las calles haciendo imposible el tránsito y, en definitiva, dotando a las calles del centro de ese sentimiento compartido tan entrañable que viene a ser "quiero que muráis todos ahora mismo y que alguien retire vuestros cuerpos para que pueda pasar al Juteco a comprarle de una puta vez la colonia a mi abuela". Reseñar que antes de salir a por los regalos esta mañana, me había prometido no volverle a comprar una colonia a mi abuela, pero conforme ha ido pasando el día, me he ido auto convenciendo de que su cara de alegría iba a ser la misma que si le hacía el Taj Mahal con mis propias manos cual Michael Scofield, y he acabado siendo un nieto ruin y despreciable, lo que sumado a la pashmina que le compré en un mercadillo de falsificaciones de China por 0,5 euros, asegurándole que era artesanía pura, me deja con pocas opciones de reunirme en el cielo con ella en otra vida. Eso sí, a las siete yo ya estaba en casa y la otra opción comenzaba a ser una figurita para el salón o una jarra bonita para la leche. ¿Qué se le regala a una abuela? En 80 años ha acumulado de todo... que conste que la colonia es buena y sé que le gusta.

Movidas de pareja. Todos estamos nerviosos, tensos, todos vamos agotando nuestras reservas de paciencia, pero si hay un colectivo que se lleva la palma en el mal rollo acumulado son las parejas que van a comprar los reyes juntos. Matrimonios de jubilados, recién casados, parejas de novios, rolletes richar-paqui, parejas gais, parejas lesbianas... todos tienen una cara de mala hostia que se transmite a varios metros y te afecta, te a-feEeec-ta. ¿Por qué? Porque la impotencia te hace necesitar que alguien pague por todo, y ¿qué mejor que culpar a tu media naranja de tu encabronamiento con el mundo? La malo es cuando te tocan delante en una cola, que te dan el rato a base de miradas, hachazos y puyazos, mutuos y/o contra la familia del otro (generalmente contra los que faltan por comprar regalo). Hacedme caso e id solos a comprar los reyes, que en un momento dado de desesperación, tomas tus propias decisiones, te tomas tu cafetín, descansas a tu gusto y, siempre tienes el móvil para las dudas.

El tiempo. Es un intangible, pero también mina la moral. Tardar diez minutos en hacerte una calle que normalmente te lleva dos, echar cuarto de hora en pagar algo o en esperar a que aparezca un dependiente para que te diga que no les queda lo que habías visto en el escaparate, hace que tardes cuatro horas en terminar lo que en tu casa habías estimado en una y media. Encima es acumulativo, y el siguiente regalo paga las consecuencias de lo que te ha costado finiquitar el anterior, y claro te vas volviendo loco.

Actitud de los dependientes. Yo desde mi casa entiendo perfectamente que no es fácil currar una semana a ese ritmo, pero cuando estoy completamente saturado y harto, el ver que el personal de las tiendas ni te mira a los ojos cuando preguntas algo o te cobra, te contestan con desgana y te miran directamente mal cuando insistes en algo, me enciende un poco. Este sentimiento es directamente proporcional a las horas que llevo por encima de mi umbral de tolerancia para comprar regalos (una hora desde que salí de casa, normalmente)

Ropa sobada. Llegar a las tiendas de ropa y ver el aspecto que tiene todo, es el antídoto contra la ilusión de comprar regalos. Cosas mal dobladas, tocadas mil veces por otras personas, amontonamientos, cosas cambiadas de sitio... ¿Qué os voy a contar que no hayáis visto?

Pedos. Todos nos tiramos pedos pero tendemos a aguantárnoslos en locales cerrados. En todos los estudios estadísticos hay grupos de población que se salen de la norma. Pongamos que un 5% de la gente se tira pedos libremente en El H&M (por ejemplo). Esto quiere decir que si caben (por ejemplo) quinientas personas (por ejemplo), hay 25 personas no identificadas en el H&M tirándose pedos en todas las direcciones. Y así en todos los sitios con sus proporciones... Yo hoy me he fumado unos cinco pedos ajenos y creedme, no ha sido lo mejor del día.

Aromaterapia, temperaturaterapia, iluminoterapia y ruidoterapia. Olor a comida, a colonia, a maquillajes, a goma, a zapatos, a punto, a café, a moqueta, a tráfico, luz de neón, de alumbrado público, de bombillas, de halógenos, aire acondicionado, frío en la calle, calefacciones imposibles, calor de rejillas del metro, voces de megafonía, niños chillando, llorando, señoras preguntando, murmullo constante, pitos de coche, ruiditos electrónicos, de máquinas registradoras, alarmas que saltan... No commént (uh-uh-uh).


Por lo demás, he comprado cosas que sé que van a gustar, incluso a mi abuela, pero eso no quita para que me sienta un poco imbécil entrando en este circo que se ha ido totalmente de las manos. Afortunadamente, sólo regalo en casa y no somos muchos, así que no me he estresado tanto como puede parecer, pero entiendo perfectamente al que tiene más compromisos y no tiene escapatoria. De ahí mi estudio.


Por la mañana me he ido a las doce al centro, me he tomado un Starbucks, he quedado con Kurt, hemos paseado, hemos comentado productos y hemos criticado looks erróneos (siempre que sean pretenciosos, que es lo justo). En Callao nos hemos separado y él se ha ido a trabajar. Ha venido CF y hemos comido en un FressCo muy tranquilamente. Hemos comprado los pocos regalos que teníamos cada uno, y me he vuelto a casa.

17 comentarios:

Will dijo...

La gente se pone muy agresiva, el sábado dos señoras discutían por una camiseta ( digo yo que para sus hijos ) en el corte ingles de Portal del Ángel.

Anónimo dijo...

Uy, y qué me dices de lo que parece un bonito árbol de Navidad (uno de cientos) y resulta camuflar barras de algo suficientemente duro como para causar cardenales en maniobras de adelantamiento (vale, fue una maniobra mal calculada). Qué dolor, p. arbolito, los voy a denunciar, además esto está a la altura justa para decapitar a uno de los ninhos hiperactivos que corren por aquí .... hm, jejeje.

Anónimo dijo...

Cuán gráfico es lo de "fumar" pedos ajenos, que me ha dado asquito hasta leerlo.
En el Fresh&co no se cómo lo hago pero siempre acabo hasta las cartolas y eso que es comida ligera y tal.

Farala dijo...

Y cómo anda la gente? Cómo camina? Yo no lo entiendo. De verdad, es superior a mí. ¿Por qué siempre, SIEMPRE vamos a paso tortuga como si fuésemos gilipollas? ¿Por qué no hay carriles especiales para gente con las piernas largas, al estilo autopista? No aguanto a la gente que va pisando huevos y que cuando cojes un poco de velocidad se te ponen delante, quejándose si no te da tiempo a frenar. Yo ayer casi me como una niñata.

¡¡¡Señora!!! ¿no ve que mido 1.87 y que tengo las piernas largas?

Eso sí, yo también tardé poquísimo en hacer mis compras. Tres horas exactas. Es que iba a tiro hecho, ya lo tenía todo pensado.

Anónimo dijo...

Yo tardé muy poquito en comprar mis regalos, aunque ya he olvidado parte de ese estrés, en mi casa los hacemos el día 24!!

Y como en tierras portuguesas hoy empiezan las rebajas... voy unos 4 días por delante del ritmo spanish...

Eso sí, en los días que pasé en España me dieron ganas de asesinar al 90% de los niños que correteaban jodiendo al 100% de los presentes en las tiendas. Deberían encerrarlos en sus casas o en el cole hasta que fueran mayores de edad!

Anónimo dijo...

cuánta razón en eso de que al final compramos los regalos como si en vez de hacerlo porque te apetece tener un detalle fuese una carrera de fondo por quitárselos de en medio...
yo sin ir más lejos, hace dos días compré cuatro regalos en menos de una hora en un centro comercial,y debo reconcerlo... eran algo cutres...
como siempre,me diré a mi misma que la próxima vez lo haré con más tiempo y no el último día.. (no me lo creo ni yo)...

Anónimo dijo...

...y es que el hombre es el único animal que tropieza dos veces en la misma piedra. Los regalos se compran antes de nochevieja.
Respecto a lo de tu abuela, te sugiero para porteriores ediciones alguna toquilla, que las hay la mar de modernas

Vespasurfing dijo...

Es que ese remordimiento de conciencia es típico. Te quedás en casa diciendo es que... como no van a recibir regalo. Y ala!! ya has caído en la trampa.

Por cierto totalmente de acuerdo con lo del carríl rápido. Yo siempre ando a toda leche y me jode sobre todo en mi barrio cuando las viejecitas van jugando a tapar la calle. ES como.. señora muérase!!!!. Realmente no quiero que se muera pero que se vaya a su casa a pasear por el pasillo si.

nanyu fonseca dijo...

lo que no entiendo mucho es lo de cogerse un dia de vacaciones para hacer los reyes. la cosa cambia si tienes vacaciones obligadas por la empresa.

yo prefiero ir comprando poco a poco segun se me van ocurriendo los regalos, aunque me siento feliz si en una tarde hago todo.

Anónimo dijo...

Salgo dentro de un rato para hacer las últimas compras. Pero voy con los cascos/música propia.

Habéis intentado escuchar villancicos en agosto? Yo así descubrí que en el fondo me hacen bastante gracia.

J dijo...

Hola Rey Mago...has hecho un resumen perfecto de los sucesos relativos a las compras de los Reyes, y aunque le has dado muy poco protagonismo creo que el tema de calefacciones imposibles es FUN-DA-MEN-TAL. Joder, que calor en todas partes, no entiendo por qué no bajan las calefacciones teniendo en cuenta las 500 personas de más que habrá en cada tienda. Lo de los olores a perfume por doquier me atormenta y que tenga que indagar en bultos me ataca tanto q paso de comprar ropa a menos que esté correctamente doblada. Por cierto, no has contado con que algunas de las tiendas que visites haya empezado las rebajas, a q no contabas con que Sfera, CorteFiel y otras ya estén en la vorágine baji-precio, todo lo que comentas se duplica.
En fin, que eso nos pasa por seguir con las tradiciones aún sabiendo que los Reyes son los padres.
p.d que te traigan muchos cositas majo.

would dijo...

Feliz 2007 a Arthur.

bernardopajares dijo...

Eso, habría que darle más importancia a lo de las calefacciones, pero por lo demás has retratado totalmente lo que se me pasa por el cuerpo cuando voy por el centro en navidades y pretendo comprar algo.

Anónimo dijo...

Sólo quiero dejar constancia de que me ha hecho un gran favor y que ha tenido mucho mejor gusto que yo al hacer los regalos...

Gracias Dwalks

Jwalks

Anónimo dijo...

Arggg, que alegría me da esto de no tener que mezclarme con la gente para ir de compras, tiatiatia, que ni en Versace ni en Cavalli pasan esas cosas. Pero es que pedos no hueles ni en Amaya Arzuaga, tiatiatia

J dijo...

Jwalks comentando!!! Menudo regalazo de reyes!!!

Anónimo dijo...

Pues... yo también me quejo de todo eso pero en el fondo me encanta regalar, muchiiiisimo más que recibir regalos así que cuando se a por lo que voy disfruto como una enana.
Lo peor es aguantar con los regalos en casa sin poder darlos, me queman las manos!!